
Entre las obras consultadas para la elaboración de este apartado están:
CABRERA, C., (1999): El Timple. Caja de Canarias, Santa Cruz de Tenerife.
DÍAZ, J., (1986): Instrumentos Populares. Caja de Ahorros Popular, Valladolid.
Son muchos los instrumentos con los que se compone la música tradicional canaria, pero hemos hecho una selección de aquellos que nos parecen más representativos para la Isla.
Actualmente, se han retomado el uso de algunos instrumentos, y la fusión de sonidos, con adaptaciones, para la introducción de nuevos ritmos; un ejemplo de ello es, el uso de la flauta, el acordeón o el violín.
El batir de pies y manos, la utilización de caracolas, palmas, piedras… son rudimentos sonoros, que al parecer, eran empleados por los aborígenes antes de la Conquista.
Hay autores que afirman que los aborígenes desconocían, incluso, el uso de los tambores y panderos, puesto que no hay evidencias ni documentales, ni arqueológicas de ello.
Otros, como Bethencourt Afonso, plantean una realidad diferente donde tambores, sonajeras, flautas de caña, pitos de tallos de cebada, castañuelas de madera (antecedente de las chácaras), cucharas de lapa, bucios y palos forman parte del conjunto de instrumentos que utilizaron los primeros habitantes de la Islas.
Tras la Conquista y Colonización llegaron a las Islas otros instrumentos como los de cuerda, que con sus afinaciones y sus ejecuciones armónicas participan del enriquecimiento de la música isleña.
Todo este mundo sonoro se va diversificando y modificando dadas las aportaciones foráneas como las propuestas africanistas.
A la hora de hablar de instrumentos hay que establecer una serie de diferenciaciones, puesto que no todos los instrumentos son iguales. Las diferencias se pueden establecer con varios parámetros, desde la forma hasta el sonido.
Por denominarlo de alguna manera, los instrumentos se pueden agrupar según sean instrumentos de: cuerda, viento o percusión.
De cuerda: la guitarra, el timple, el laúd, la bandurria, y ya menos comunes son el contrabajo y el violín.
De viento: la flauta, el pito y la caracola.
De percusión: las hueseras, el pandero, el tambor y el triángulo, entre otros.